El síndrome de las Agujas Picantes
Microrrelato de vanguardia. Realismo mágico y algún otro género que quieran inventar.
El síndrome de las agujas picantes.
Júrenme
que si les cuento no le van a andar diciendo mi secreto a esos bichos feos que
se esconden debajo de mi cama. Se despiertan cuando yo duermo y me pinchan con
agujas los dedos de los pies, no importa en qué colchón del mundo me acueste,
ellos me encuentran y por la mañana tengo los pies sangrando. Pero hace ya
varias noches que los traigo desconcertados y ahí es donde entra mi secreto:
Cuando las estrellas se juntan todas en el cielo, escapo de los cuartos y sin
que la gente que dice que tengo esquizofrenia me vea, hago un nidito en el cementerio y me quedo ahí
durmiendo toda la noche, con fantasmas, pero sin bichos. Son ellos –los
fantasmas– los que no dejan que los bichos de las agujas me encuentren, y aunque
a veces las ratas quieren ser mi almohada, tengo que colgar los peluches en las
cruces y las moscas hacen amores en mi pelo, no me importa porque no me sangran
los pies.
Por Giuliana Urbán para Ah re.
Por Giuliana Urbán para Ah re.
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